Comerciantes, empresarios y organizaciones civiles pidieron al gobierno municipal de Ecatepec evitar que vendedores de autos vuelvan a apoderarse de la carretera Texcoco-Lechería, en la zona de Venta de Carpio, la cual fue liberada por el ayuntamiento al inicio de la administración que encabeza el alcalde Fernando Vilchis Contreras.
Desde el comienzo de la gestión del edil, todos los comerciantes de autos que prácticamente secuestraban la Texcoco-Lechería fueron desalojados para instaurar una zona más segura para las familias, comerciantes y empresarios de la zona.
Los interesados denunciaron que en fechas recientes, los vendedores de vehículos de dudosa procedencia intentan, con el apoyo de diputados, volver a invadir la vialidad, como en los tiempos en que gobernaba el PRI el municipio.
Señalaron que desde que los vendedores de automóviles fueron retirados de la vialidad, el sitio es más seguro, el robo a compradores y vendedores es nulo, se erradicó de raíz la venta clandestina de alcohol, también la de autopartes de procedencia ilícita, así como el comercio de drogas y enervantes.
Entre las empresas que respaldan dicho ordenamiento y se unieron a la petición al alcalde se encuentran: Firts Cash, Farmacia Guadalajara, Edificio Gym, Autolavado, Accesorios, Servicio Eléctrico, Restaurante La Selva, Tianguis e autos El Llano, Osmesi, locales de comida, Báscula Pública, Confianza, La Venta y Ballisco, Estacionamiento, Sitio de Taxis, Gasolinería G500, Tianguis de autos 27/2, bodegas de almacenaje, Restaurante El Potrero y el mismo tianguis de Venta de Carpio.
Destaca también el centro comercial Gran Patio Ecatepec, ya que su estacionamiento prácticamente era monopolizado todos los domingos por los comerciantes y visitantes que hacían de la avenida principal una romería, el comercio ambulante también era un problema que creció sin medida.
En la calle había vendedores de sombreros, adornos para autos, gorras, aguas frescas, raspados, alimentos chatarra, y hasta bebidas embriagantes como micheladas o cocteles, lo que provocaba discusiones o enfrentamientos entre quienes llegaban para negociar alguna unidad.
La portación de armas también llegó a evidenciarse en el lugar, incluso se registraron enfrentamientos a balazos con saldos fatales.
“Los vendedores que se instalaban en determinado espacio de la avenida Texcoco – Lechería con el paso de las semanas se sentían dueños del lugar e instalaban unidades a propósito, para que nadie transitara por su espacio de trabajo”, dijo uno de los propietarios de un local cercano.
La política de cero tolerancia del gobierno de Ecatepec ha sido infalible en la recuperación de espacios, los tianguis de Ecatepec también dejaron de vender micheladas y mojitos, esto ha sido notorio entre los ecatepenses y ahora ya no desean que estos lugares vuelvan a caer en manos de delincuentes.
