El partido Nueva Alianza del Estado de México, resultó el gran perdedor de la jornada electoral del pasado 4 de junio, debido a que se convertiría en el único partido que perdería su registro como partido político local, al no obtener el 3% de la votación.
Aunque falta conocer los resultados definitivos con los cómputos de la elección, luce difícil que Nueva Alianza logre remontar su porcentaje que apenas rebasa el 1% del total de votos.
Para Nueva Alianza, el escenario es fatal, pues hay que recordar que apenas en 2018, consumó la perdida de su registro nacional, por lo que, de ser oficial, desaparecerán del mapa político estatal y con posibilidades casi nulas para el proceso electoral del 2024.
Los casos más recientes de pérdida de registro de partidos políticos, nos llevan a los partidos Encuentro Solidario, Redes Progresistas, Fuerza por México y específicamente Vía Radical, por tratarse de un partido político local, todos sin una base social sólida, ni militancia histórica en la cual pudieran respaldar su fuerza electoral para mantener su registro.
Sin embargo, el caso Nueva Alianza Estado de México es distinto pues históricamente logró alianzas electorales efectivas, contaba con una militancia sólida sostenida por el magisterio que fundó este intitulo político y que le dió la espalda a la actual dirigencia en el reciente proceso electoral por dos razones fundamentales: la corrupción y malos manejos del aún presidente estatal Mario Palomino, y su pacto sin consultar a las bases, con la coalición perdedora PRI-PAN-PRD.
Por su parte, el magisterio apostó y ganó con su alianza electoral con la Maestra Delfina Gómez, pues aún sin partido político, concretó acuerdos que son de altísima relevancia para las maestras y los maestros del Estado de México.
La división generada por la actual dirigencia de Nueva Alianza, tendrá como consecuencia la muerte de este instituto político; sin embargo y solo para la anécdota, es imposible no pensar el escenario positivo en el que se encontraría este partido sin la traición de Mario Palomino a la base magisterial, pues no habría consolidado su compromiso con la 4T.
Por su parte, los maestros y la verdadera militancia de ese partido cerraron filas con el presidente López Obrador, con la próxima gobernadora del Estado de México y son aliados indiscutibles de cara al proceso electoral de 2024.
Otro partido que no alcanzaría el umbral mínimo del 3% sería el PRD, que obtuvo el 2.97% de la votación y que, aún si no revierte tres décimas porcentuales para llegar al mínimo establecido por la ley, mantendría su acreditación al ser partido político nacional.
