Manuel Godínez
Contrapapel.- La Oficina de Defensoría de Derechos de la Infancia (ODI) presentó este lunes un informe que revela la persistencia de abusos sexuales y pornografía infantil detectados en 18 escuelas, entre ellos, el Estado de México.
De acuerdo con los casos de agravio a infantes ocurridos de 2008 a 2018, las entidades de mayor incidencia son: la Ciudad de México, Estado de México, Jalisco, Baja California, Morelos, San Luis Potosí y Oaxaca. En todos, la impunidad es del 100 por ciento.
En dicho período, se identificaron casos de abusos sexuales a niñas y niños de entre 3 y 7 años, en 18 escuelas: seis en Ciudad de México; cuatro en Jalisco; dos en el Estado de México, Oaxaca y Morelos; San Luis Potosí y Baja California con uno.
De acuerdo al informe “Es un secreto. La explotación sexual en escuelas”, la organización denuncia que en 2019 la Fiscalía General de la República (FGR) concluyó con una declaratoria de no ejercicio de acción penal la posibilidad de investigar la trama criminal detrás de la querella presentada por “probables delitos de pornografía infantil cometidos en escuelas”.
El objetivo de tener los casos registrados y presentarlos en conjunto en una denuncia, es para que se tengan “como indicios del posible delito a investigar”, debido a que, durante años la estrategia de la “fragmentación de casos” de las instancias de procuración de justicia, han permitido que la impunidad siga creciendo.
A pesar de que la OFI presentó todas las pruebas que exhibían patrones de que toda una red de bandas delictivas con alcance internacional estaba detrás, el Ministerio Público federal consideró “agotada la investigación”.
“Los patrones delictivos marcados por acciones organizadas entre varios adultos y perpetradas de manera masiva en planteles tanto privados como públicos, comportamientos que pudieran ser indicativos de que algunas escuelas han sido capturadas para la comisión de delitos de explotación sexual en línea”, abundó la Oficina.
Los testimonios, reveló la OFI, constan de 37 infantes victimas de “tocamientos” por parte de adultos o ser obligados a tocarse entre ellos; 17 “un maestro exhibiéndose ante el salón entero; 11 “describen actos que constituyen violación equiparada”; ocho mencionaron haber sido agredidos físicamente; siete fueron abusados frente a un grupo de niños y niñas; cinco mencionan golpes; cuatro refirieron haber sido fotografiados o filmados.
Otros cuatro aseguran que fueron amarrados; cuatro aseguran que se usó “orina, heces o vómito” en el abuso, tres fueron “penetrados con basura”, tres dijeron que les “picaban las manos o los pies”; tres describieron a compañeros “pidiéndoles ayuda”; a dos les dijeron que “sus padres estaban presentes”; y dos más “la presencia de público o personas que observaban el abuso”.
Finalmente, la organización lamentó que ante una problemática mencionada, “los padres y madres carecen de información adecuada sobre cómo hablar con sus hijos e hijas para detectar posible violencia sexual”, mientras que los menores “carecen de información y medios accesibles para denunciar la violencia”.
