Manuel Godínez
Contrapapel.- Por advertencia del Papa Francisco, el polémico obispo emérito de Ecatepec, Onésimo Cepeda Silva, anunció que no buscará un lugar en la Cámara de Diputados.
“Yo jamás voy a abandonar mi ministerio porque sería tanto como vender mi progenitura por un plato de lentejas, por ser diputado, es una pendejada de tres años”, arremetió tras el manotazo del Papa.
En una entrevista por televisión, el también amigo del ex gobernador priista del Estado de México, Eruviel Ávila Villegas, reculó en su decisión de aparecer en la boleta electoral del próximo seis de junio.
Hasta la noche de ayer, Cepeda Silva se mantenía como precandidato del partido recién creado, Fuerza por México, pero luego de diversas críticas por el papel que ha tenido con los gobiernos más oscuros del priismo mexiquense, declinó en su intento.
Con esto, la vacante en Fuerza por México para la diputación del distrito 21, con cabecera en Ecatepec, sigue vigente.
“Hay riesgo de perder el obispado, y eso es mucho más importante que ser diputado”, aseveró en otra parte de la entrevista.
El historial del obispo data mucho más allá del alto cargo que tuvo en la Iglesia Católica, pues fue fundador del Grupo Financiero Inbursa con Carlos Slim. En 2010, decidió poner fin a su carrera eclesiástica tras ser relacionado en la supuesta simulación de un préstamo de 130 millones de dólares para hacerse con una de las colecciones de arte más exclusivas.
Fuerza por México ha sido señalado como un partido satélite en favor de Morena, pues su presidente y fundador, es Pedro Haces Barba, senador suplente de Morena y líder de la Confederación Autónoma de Trabajadores y Empleados de México (CATEM), la cual, reúne a más de mil sindicatos y a millones de trabajadores.
