Por Flor Goche
México, 29 Oct (Notimex).- Cada año en México se registran 170 mil casos de infarto cerebral, lo que significa 466 en promedio cada día, por lo que para disminuir esa cifra, las autoridades del sector salud implementan acciones de difusión de síntomas y de atención oportuna a los pacientes.
Un infarto cerebral ocurre cuando se interrumpe el flujo de sangre al cerebro, lo que ocasiona que este órgano vital deje de recibir oxígeno y nutrientes esenciales.
El neuroradiólogo intervencionista del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), Héctor Montenegro, subrayó que en la atención al ataque cerebral el tiempo es importante, pues por cada minuto sin atención este órgano pierde 1.9 millones de neuronas.
En el marco del Día Mundial contra el Ataque Cerebrovascular, que se conmemora cada 29 de octubre, advirtió que si una persona presenta dificultad para hablar o para mover o levantar uno de sus brazos, o se le cae una mitad del rostro, es muy importante llevarla con urgencia a un hospital especializado.
Explicó que el infarto cerebral es uno de los problemas más frecuentes entre las enfermedades vasculares cerebrales, que son alteraciones neurológicas de aparición repentina en personas de todas las edades, pero sobre todo en mayores de 65 años.
De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Neurología y Neurocirugía “Manuel Velasco Suárez” de la Secretaría de Salud, estas enfermedades es la causa más común de incapacidad en adultos y la quinta razón de muerte de la población en el país.
Al respecto, el médico neurólogo del Departamento de Neurología y Psiquiatría del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán, Erwin Chiquete, una de cada tres personas presenta algún grado de discapacidad después de sufrir una enfermedad vascular cerebral.
Ello, indicó, porque el cerebro es el responsable de generar los movimientos, percepciones sensitivas y acciones que realiza el cuerpo.
Según los especialistas, la hipertensión arterial, la diabetes, la fibrilación auricular, la obesidad, el tabaquismo, la adicción al alcohol o a las drogas son importantes factores de riesgo que pueden aumentar las posibilidades que una persona sufra un ataque cerebral.
La Dirección de Prestaciones Médicas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) informó que para atender este padecimiento cuenta con mil 521 Unidades de Medicina Familiar, 248 unidades médicas hospitalarias, 36 Unidades Médicas de Alta Especialidad y dos mil 918 módulos PrevenIMSS.
Para su tratamiento y diagnóstico cuenta con tres mil 182 camas hospitalarias, 128 tomógrafos axiales computarizados, 25 equipos de resonancia magnética, así como 128 unidades con Medicina Física y Rehabilitación.
Por su parte, el ISSSTE reportó que en hospitales de Hidalgo, Jalisco, Yucatán y en el Centro Médico Nacional 20 de Noviembre se aplica la estrategia Res-ISSSTE Cerebro, enfocada a implementar atención oportuna a los pacientes y a explicar a la población los principales síntomas para acudir de inmediato a urgencias.
NTX/FG/EGR