El pasado jueves, la Sala Superior del TEPJF declaró improcedente el SUP-REC-275/2023, recurso legal que tenía en suspenso el registro de Nueva Alianza como partido político local. Un asunto por demás “manoseado” pues desde el mes de septiembre del año pasado fue congelado en contubernio entre el aún dirigente y autoridades electorales.
Nueva Alianza EdoMex perdió su registro como partido local al obtener solo 70 mil votos en lo individual en la pasada elección de Gobernadora, así lo confirmó el Instituto Electoral del Estado de México y posteriormente el Tribunal Electoral Local; sin embargo y para sorpresa de todos, la Sala Regional Toluca del TEPJF lo revivió con argumentos ilegales y por demás tendenciosos. Esto último, se confirmó con la reunión entre Mario Cervantes Palomino y Reyes Rodríguez Mondragón, en la que celebraron dicha sentencia en un lujoso restaurante de la Ciudad de México.
Dicha reunión, se dio a conocer mediante una denuncia ciudadana que puso en el ojo del huracán al expresidente del tribunal electoral quien habría sido el artífice para para darle vida artificial a este partido local mediante componendas con Mario Palomino. Con señalamientos tan graves de corrupción y con argumentos insostenibles, la estrategia fue congelar el asunto por meses, en los cuales en dos ocaciones buscaron negociar una votación favorable para darle legitimidad al registro de NA, nunca tuvieron éxito.
Sin embargo, se dice que el incentivo para mantener el registro de este partido local fue tan fuerte, que alcanzó para que los magistrados de la sala superior del TEPJF, con excepción de Janine Otálora Malassis, decidieran simplemente hacerse de la vista gorda, no analizar el asunto y dejar impune al aún dirigente.
El actuar tendencioso por parte de autoridades judiciales, desafortunadamente no es un asunto aislado en nuestro país, de forma sistemática jueces y magistrados violan flagrantemente la ley y se corrompen para satisfacer intereses personales, políticos y económicos. De ahí la trascendencia de la reforma judicial enviada hace unos días por el Presidente de la República, que busca dotar de legitimidad a este poder del Estado, arrancando la corrupción desde la raíz.
Ante tal cochinero, es indispensable decir con toda claridad que Nueva Alianza vive por la corrupción que impera en las autoridades electorales, pues la ciudadanía mexiquense decidió en la pasada elección que no es una opción ciudadana, que no cuenta con respaldo social y que es el botín familiar de Mario Cervantes Palomino.
Y no es necesario ser adivino, pues la inversión que realizó para mantener con vida a NA por unos meses más le será redituable, tan solo de prerrogativas para campaña electoral recibirá cerca de 80 millones de pesos, dinero que sería muy interesante saber donde termina, pues testimonios de ex colaboradores señalan que no reciben un solo peso para operar y una vez que los utilizan los corren a patadas, literalmente.
Por eso no es de extrañar la desbandada que ha sufrido este instituto político desde su última derrota en 2023, donde incluso cuadros medianitos como Jovan Balcázar de Atlacomulco y Evangelina Sandoval de Nezahualcóyotl (por cierto los más competitivos que tenían), huyeron hacia otras fuerzas políticas y en casos peores, gente que alguna vez fue muy cercana a la dirigencia, enfrentan calumnias y denuncias falsas por supuesto acoso, so pretexto de no pagarles sus compromisos laborales.
La cruda realidad de Nueva Alianza EdoMex, es que pasó de una opción electoral fuerte que fuera el brazo político del magisterio, a un lucrativo negocio de la familia de Mario Palomino y para los inocentes que aún dudan guarden este texto, en unas semanas serán registrados los hijos del disminuido dirigente como candidatos a diputados locales, el primero como pluri 1 en la lista de NA y en segundo término en un distrito local de Ecatepec.
No obstante no tendrán éxito y el registro como partido local sólo está seguro por tres meses más, el nivel de mezquindad es tal que dibuja de cuerpo completo a este pintoresco personaje. Vale la pena recordar cuantas veces ha mentido sobre sus estructuras, los 400 mil votos imaginarios que le empeño a Alejandra del Moral y que terminaron por sepultarla, la supuesta injerencia que tiene sobre el magisterio y un largo etcétera de mentiras.
La cruda realidad de ese moribundo partido es que existe una gran diferencia entre tener un proyecto político exitoso, a ser un vividor y resistir todo cuanto le sea posible.
