Por Silvia Arzate Rodríguez
La Organización Mundial de la Salud (OMS) reconoce como epidemia mundial al estrés, y el laboral es el primer problema de salud de los trabajadores.
México ocupa el primer lugar mundial de incidencia del padecimiento, 75 por ciento de los trabajadores del país lo padecen; le siguen China y Estados Unidos en la clasificación, con 73 y 59 por ciento, respectivamente.
La OMS, reconoce al “burnout” o “síndrome del trabajador quemado” como una enfermedad relacionada con los problemas de estrés ocasionados por el trabajo, y ya fue incluido en la Clasificación Internacional de Enfermedades y entrará en vigor el 1 de enero de 2022.
El síndrome de “burnout” se asocia con el agotamiento mental, emocional y físico causado por el estrés laboral.
De acuerdo con especialistas, el estrés laboral aumenta el riesgo de depresión, ansiedad, insomnio, fatiga, úlceras, pérdida de memoria, falta de concentración, problemas cardiovasculares o enfermedades coronarias, como infartos.
Se presenta cuando la carga de trabajo es excesiva y hay presión para cumplir metas o largas jornadas laborales, a demás de la falta de descanso o desconexión.
Si bien el estrés es necesario y positivo por detonar la acción e impulsar aspectos fisiológicos y cognitivos, cuando es demasiado, deteriora la salud de la persona.
Para evitar enfermedades por estrés laboral, se recomienda además, la activación física y una alimentación a base de verduras y frutas frescas, y dormir ocho horas diarias.
De igual manera mantener con cierta regularidad una desconexión laboral y evitar revisar el correo fuera de la oficina, así como responder llamadas que no sean urgentes en el tiempo libre, y no llevarse trabajo a casa los fines de semana.
También es relevante mantener un positivo, cordial y respetuoso ambiente de trabajo e incentivar relaciones cordiales con los compañeros de trabajo.