Se registra enfrentamiento entre policías municipales y grupo antisecuestro en Tlalnepantla

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Redacción Contrapapel.- Ayer, elementos de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) y de la Policía Municipal de Tlalnepantla, donde gobierna el morenista Raciel Pérez Cruz, se enfrentaron a balazos y a golpes.

Las versiones de ambas instituciones se contradicen respecto a la confrontación en la que se dijo que acudían al traslado de cuatro supuestos delincuentes al Centro de Justicia y donde solo se atendió un reporte ciudadano.

De acuerdo con el ayuntamiento, los municipales respondieron un reporte realizado al C4 por vecinos de la colonia El Olivo II en el que reportaban la presencia de un convoy de hombres encapuchados y con armas de grueso calibre, al arribar al lugar, fueron “recibidos a balazos”.

Contrario a los dichos de la FGJEM, los encapuchados “afirmaron ser policías ministeriales pero nunca se identificaron ni mostraron algún documento como orden o cateo, que justificara su presencia en el lugar” por lo que no frenaron los balazos.

El saldo del enfrentamiento, según el gobierno de Tlalnepantla, fue de cinco policías municipales heridos, tres con armas de fuego y dos por lesiones, todos fueron llevados a la Cruz Roja local. Además, dos unidades municipales resultaron con impactos de bala y llantas ponchadas.

Por su parte, la FGJEM aseguró que sus agentes, adscritos a la Fiscalía de Secuestros del Valle de México hicieron un operativo en las inmediaciones de la Colonia La Blanca.
Ahí detuvieron a dos hombres y dos mujeres presuntamente relacionados al secuestro de una mujer de 73 años que fue rescatada hace dos días.

Señalaron que fueron los policías municipales quienes los agredieron, pues «luego de la movilización, cuando el personal de esta Fiscalía avanzaba hacia las instalaciones del Centro de Justicia de esta localidad, fueron interceptados por los elementos municipales, quienes dispararon en contra del personal, no obstante que los efectivos de la FGJEM se identificaron, por lo que debieron repeler la agresión», refiere la dependencia estatal.

Tanto la Fiscalía como el Ayuntamiento, solo han coincidido en que realizan las investigaciones y declaraciones pertinentes sobre el actuar de su personal para deslindar responsabilidades.